jueves, 16 de diciembre de 2010

NACIONALISMO: ¿AMBIGÜEDAD O CONFUSIÓN?

El concepto de «nacionalismo» es ambiguo y confuso.
Ambiguo porque a) por un lado se refiere al sentimiento de pertenencia a una comunidad en virtud de unos caracteres comunes y b) por otro, se designa a la creciente tendencia a lo largo del XIX, a identificar la comunidad nacional con las fronteras de un estado político independiente (estado-nación). 
Esto último sería la aplicación en el campo de las relaciones internacionales por parte de los individuos-comunidades nacionales del principio de libertad unidad e independencia nacionales.
           
 Confuso en cuanto que se trata de un sentimiento más que de una doctrina. Generalizando se puede establecer la definición en la conciencia de pertenecer a una comunidad ligada por una herencia común de lenguaje y cultura, unida por vínculos de sangre y en especial relación con el suelo de la patria.
            En definitiva, lo más claro, es que es uno de los elementos determinantes en la sucesión de corrientes que dibuja la trama de la historia política y social del siglo XIX, entre los que hay que citar: Liberalismo, el mismo nacionalismo, la democracia y el movimiento obrero.
 Elementos conformantes del nacionalismo
            
Este fenómeno heterogéneo provoca que podamos distinguir varios nombres: idea nacional, sentimiento nacional o movimiento de las nacionalidades y se caracteriza por:
            * Fenómeno heterogéneo que encuentra su unidad en el hecho nacional.
            * Obra de intelectuales que buscan raíces históricas, que mejoran y renacen las lenguas nacionales, que forma parte de la filosofía política.
            * Movimiento que alcanza a la sensibilidad (mundo del sentimiento), de donde obtiene su irresistible fuerza.
            * Hace intervenir intereses, para mejorar la economía, o utilizarlo para formar una nación.
            * Carácter universal en cuanto al tiempo y geografía.
            * No tiene lazos sustanciales con otras ideologías.
           * La idea nacional necesita apoyarse a otras ideas políticas, amalgamarse con otras filosofías. 

Puede entenderse como un conjunto ideológico de "derechas" como de "izquierdas", por lo que puede señalarse la existencia de dos nacionalismos (ambigüedad):
            - Nacionalismo de derecha: aristocrático, conservador y tradicionalista. Recluta entre líderes notables y tradicionales.
            - Nacionalismo de izquierda: popular, democratizador de la sociedad. Recluta entre las clases populares.


Teodoro Fernández